Como cada año, con el buen tiempo aumentan los planes al aire libre, ya sea con familiares o amigos, como comer de barbacoa en el jardín o disfrutar de unos días de descanso en esos lugares privilegiados que solo los campings pueden ofrecer.
Sin embargo, hay que tener siempre precaución para que la diversión no acabe en desastre, como desgraciadamente vemos todos los veranos. Por ello, la empresa especializada en servicios técnicos, de seguridad y certificación, TÜV Rheinland, ha querido ofrecer una serie de consejos básicos la hora de encender la barbacoa o pasar unos días de camping.
En la barbacoa
Después de tantos meses de inactividad, es necesario revisar el estado de la parrilla, independientemente de si es de carbón, gas o eléctrica.
También hay que inspeccionar los utensilios que se van a utilizar, tanto para cocinar como para su limpieza, como pinchos, cuchillos, tenedores, cepillos o espátulas. Si alguna pieza está gastada, es fundamental sustituirla.
Aunque parezca una obviedad, debemos ubicar la barbacoa siempre en el exterior. Tiene que estar alejada de cualquier edificio, árbol o material inflamable.
Colocar la parrilla en función del viento y sobre una superficie plana bien asentada.
En el momento del encendido, evitar el uso de alcohol o gasolina. Hay productos específicos que son más seguros. Es recomendable el uso de carbón vegetal en lugar de leña o madera como combustible, evitando así la generación de llama. Además, el humo que desprende la leña al quemarse tiene más concentración en componentes perjudiciales para la salud, como son el monóxido de carbono y el óxido de azufre, que en la combustión del carbón vegetal.
No dejar nunca el fuego sin vigilancia. Mientras estamos charlando con la gente, tomando agradablemente una bebida, o sencillamente sentados al sol, cualquier chispa puede derivar en una tragedia. Evitar siempre que los pequeños de la casa jueguen en las inmediaciones de la barbacoa.
Tener siempre algo a mano para evitar que el fuego se pueda propagar. Las soluciones más eficaces son extintores, cubos de agua o de arena.
Por último, hay que mantener siempre la barbacoa limpia.
En el camping
Comprobar con antelación que las tiendas de campaña, encargadas de la protección y seguridad de quienes van a dormir en ellas, están en perfecto estado.
No acampar en zonas prohibidas. Existen áreas habilitadas que cuentan con instalaciones adecuadas, así como la supervisión y seguridad de las autoridades.
Montar la tienda de campaña en un terreno preferiblemente plano, alejada del mar u orilla del río, y nunca debajo de algo que pueda desprenderse, como por ejemplo los árboles. Hay que tener en cuenta el viento y levantar el campamento en contra de él, para protegerse del mismo y evitar que se vuele la tienda.
Intentar no hacer fogatas, ya que podría causar un incendio. Para ello, es mejor llevar una cocina de gas portátil. Si se opta finalmente por encender una hoguera, es indispensable confirmar que se trata de un emplazamiento permitido, y que esté alejada de las tiendas y vegetación seca.
Estar preparado para un plan B: llevar un botiquín de primeros auxilios, un generador para cargar la batería del móvil, una brújula y un mapa o GPS.
Cuando termine la estancia, meter la basura en una bolsa y tirarla en un lugar habilitado para residuos.
Publicado por Diario de gastronomía